The Puerto Rico Gamble

En junio, Alejandro García Padilla, anunció la imposibilidad de pagar la deuda de 72 mil millones acumulada por el gobierno de Puerto Rico y las estrategias necesarias para asumir ciertas responsabilidades económicas. El anuncio comenzó una conversación sobre quiénes debían pagar la deuda, pues los ajustes trajeron consigo recortes en los servicios públicos como la educación y la transportación colectiva. Inversionistas de Wall Street se han sentido atraídos por esta situación al comprar deuda y beneficiarse de incentivos gubernamentales hacia sus negocios en la isla, como las leyes 20 y 22. Pero, ¿qué efectos tienen esas políticas públicas en la vida de los ciudadanos? El premiado programa Fault Lines de la cadena de noticias Al Jazeera America vino a Puerto Rico en meses recientes para realizar un reportaje sobre la crisis económica.

Puerto Rico se vende

Lea la versión en inglés de este comentario. Es viernes, 27 de febrero, el segundo día del Puerto Rico Investment Summit que comenzó el día antes, para presentar las ventajas de las leyes 20 y 22 de 2012 que benefician a inversionistas extranjeros. Estamos en el hotel del multimillonario John Paulson, el Condado Vanderbilt, escribimos con un bolígrafo negro que lee el nombre del hotel junto a su logo corporativo grabado en color dorado, sobre una libreta que lee Merrill Lynch Bank of America Corporation. El primer día del Summit, Fahad Ghaffar, director ejecutivo de Paulson & Co. contó que su compañía está muy interesada sobre construir edificios en los espacios que hoy son estacionamientos frente al mar, en el litoral de la avenida Ashford.