Los detractores de José Ortiz Vázquez se quedaron esperando por que se materializara en estos días su anticipada renuncia a la presidencia de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) tras el intercambio de zarpazos públicos con el gobierno entrante. Ahora fuentes de dentro de la corporación pública aseguran que el funcionario estaría forzando una negociación para recibir compensación por abandonar la posición antes de fin de año.
Si renuncia al cargo, Ortiz Vázquez no recibiría ninguna paga extraordinaria más allá de los balances de licencias que le corresponden, pero si lo despiden, la Junta tendría que compensarlo y ahí entraría la negociación de cuánto dinero recibiría.
Algo similar pasó cuando el gobernador Aníbal Acevedo Vilá le retiró la confianza a Jorge Rodríguez como director de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), siendo miembro de la Junta de Directores de la AAA, y se le compensó generosamente por la terminación.
Por el momento la situación está fluida, aunque en sus expresiones públicas Ortiz Vázquez siempre ha mostrado preferencia por quedarse como presidente de la Junta de Gobierno de la AEE, considerada una gallinita de huevos de oro con decenas de proyectos y contratos millonarios planificados, a diferencia del déficit millonario que deja en Acueductos y un difícil panorama con los bonistas, que podrían empujar otro antipático aumento tarifario.
Habría personas en la Junta de Directores de la AAA, según supo el Centro de Periodismo Investigativo (CPI), que saben que Ortiz Vázquez renunciaría efectivo el 31 de diciembre, lo que dejaría el camino abierto para nombrar al actual director ejecutivo de Infraestructura, Alberto Lázaro, quien se dice que es el favorecido por el entrante gobierno de Alejandro García Padilla.
El ingeniero Lázaro, como director de Infraestructura, ha estado a cargo de los proyectos de mejoras capitales de la AAA y fue subdirector de esa oficina cuando Ortiz Vázquez la dirigía durante la administración de la gobernadora Sila Calderón.
Tras señalarse la falta de confianza en él, en la AAA surgieron versiones de que Ortiz Vázquez cambió de parecer y se quedaba hasta el fin de su término en el 2014. Su portavoz de Comunicaciones, Edith Seda, se limitó a decir al CPI que “él está evaluando las cosas”.
En cuestión de días el ambiente pasó de, darle espacio a lo que está previsto que suceda, a ponerlo en la palestra para que quede meridianamente claro que no lo quieren. Primero lo estableció la copresidenta del comité de transición y designada secretaria de la gobernación, Ingrid Vila, y lo reiteró el gobernador electo después que la Junta de AEE, bajo la batuta de Ortiz Vázquez, confirmó a Josué Colón como director ejecutivo en propiedad de la AEE.
Ortiz Vázquez dijo el 4 de diciembre que se quedaba como presidente de la Junta de AEE hasta que venza su nombramiento. Al día siguiente García Padilla reafirmó las declaraciones de Vila: “Josué Colón, ni José Ortiz, entre otros, gozan de mi confianza. No han desempeñado sus funciones adecuadamente, por lo tanto, yo espero que no ocupen las posiciones públicas que ocupan, a partir del 2 de enero”.
Tras defender la gestión y confirmación de Colón, el 4 de diciembre Ortiz Vázquez dijo en El Nuevo Día: “Le vamos a dar toda la deferencia al gobernador entrante a que si él quiere someter nombres para dirigir la agencia (AEE) va a tener toda la apertura de la Junta para su consideración”. Pero las deferencias cambiaron después de las declaraciones de García Padilla.
El 6 de diciembre cambió la tonada y Ortiz Vázquez dijo en El Vocero: “Primero que nada, yo no me muero por trabajar con García Padilla. Realmente él tiene bastante trabajo buscando gente de su partido que quiera trabajar para él y se le está haciendo un poco difícil. Yo tampoco me estoy muriendo por trabajar para él”.
El ingeniero indicó que no tenía planes de renunciar, aunque, “realmente no quiero convertirme en obstáculo para nadie y que cada cual cargue con su responsabilidad. No voy a convertirme en objeto para echar las culpas de las cosas que quizás no le funcionen. Mi interés es ayudar como lo he hecho con otros gobiernos populares”.
Alegó no querer ser estorbo, pero si prolonga la situación, ya colaboradores del PPD han encontrado “causales” legales para sacarlo de la presidencia de la AAA por “incompetencia”, mencionando varios asuntos de su desempeño con el ajuste tarifario, el presupuesto y la negociación colectiva, entre otros, según fuentes del CPI.
El resentimiento del Partido Popular Democrático (PPD) con Ortiz Vázquez no es nuevo. Tiene raíces que se remontan al final de la gobernación de Aníbal Acevedo Vilá (2008), cuando le pusieron el mote de “traidor” al trascender que estaba trabajando en el programa de gobierno y ayudando a Luis Fortuño como candidato a la gobernación por el Partido Nuevo Progresista cuando aparentaba ser de confianza como jefe de la AAA.
Ángel Figueroa Jaramillo, presidente de la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER), también se alió con Pedro Irene Maymí, presidente de la Unión Independiente de Empleados de la AAA, para combatir la continuación de Ortiz Vázquez en los dos cargos.
Figueroa Jaramillo cree que García Padilla debe “restructurar” la Junta de la AEE e insiste que Ortiz Vázquez ha llevado a la AAA a la quiebra.
La Junta de Gobierno de la AAA, que preside Edgardo Fábregas, tiene nueve miembros y es el organismo con la facultad legal de nombrar al presidente ejecutivo, así que las movidas del nuevo gobierno van enfocadas por múltiples vías.
De los nueve miembros de esa junta, cinco deben ser ciudadanos particulares, entre ellos está Carmen Ana Culpeper, secretaria de Hacienda en la gobernación de Carlos Romero Barceló y presidenta de la Compañía Telefónica en la administración de Pedro Rosselló. También está allí Carlos Dávila, también síndico de la Universidad de Puerto Rico, y Aura González Ríos, exsecretaria del Trabajo en la gobernación de Pedro Rosselló; más los dos directores ejecutivos de la Asociación y Federación de Alcaldes; el presidente de la Junta de Planificación, Rubén Flores Marzán; y el director ejecutivo de la AEE, Colón. Los dos últimos son miembros ex oficio.
Se anticipó al CPI que con la renuncia de Ortiz Vázquez, Fábregas haría lo propio como presidente de la junta de la AAA. Dávila y González Ríos cierran su término en junio de 2013, pero Colón se quedaría más mientras siga siendo director de la AEE.
Los términos de los nombramientos en la Junta tienden a ser escalonados y van desde uno hasta cinco años. Cuando expiran, continúan en su función hasta un máximo de 90 días en lo que se nombra un sucesor.
Dicha Junta tiene facultad legal, según la ley orgánica de la AAA, de llenar la posición de presidente ejecutivo con uno de sus directores independientes.