El boom de Monsanto y las semilleras estalla en el sur de Puerto Rico

Puerto Rico es el epicentro de experimentos con semillas modificadas genéticamente en Estados Unidos y sus territorios. Del negocio se benefician multinacionales como Monsanto, DuPont Pioneer, Dow AgroSciences, Syngenta Seeds y AgReliant Genetics, que ya ocupan el 14% de las tierras públicas con el mejor potencial para producir alimentos. Las semilleras reciben más subsidios que los impuestos que pagan al gobierno de una isla sumida en su peor crisis fiscal.

El dinero público subsidia a Monsanto

Usted que rinde planillas, sepa que parte de sus impuestos ayudan a enriquecer aún más a empresas multimillonarias como la polémica Monsanto. El Departamento de Agricultura de Puerto Rico ha otorgado, en los últimos seis años, más de $20 millones en fondos públicos a ésta y otras siete multinacionales, que han llegado a la Isla a experimentar con semillas modificadas genéticamente. Las compañías beneficiadas, sin embargo, incumplen un requisito fundamental para obtener esos incentivos: no son empresas agrícolas. Además, cuentan con el visto bueno del Gobierno para controlar más de 500 acres de tierra; o sea, exceder el límite que permite la Constitución. Así lo sostiene una opinión confidencial del Departamento de Justicia, a la que tuvo acceso el Centro de Periodismo Investigativo (CPI).