[TRANSCRIPCIÓN]

Nore Feliciano: Estás escuchando De cerca, un podcast del Centro de Periodismo Investigativo.

José Encarnación: La banda de Río Grande calienta motores para su ensayo semanal. Lo hacen desde un salón de una escuela rescatada del abandono en Río Grande, un municipio en el noreste de Puerto Rico. La mayoría de los jóvenes que escuchamos son de la escuela pública. Se cuentan con los dedos de una mano los que antes de llegar aquí tomaron, al menos, una clase de música en su escuela.

Estudiante Stephanie Delgado: Ahora mismo trabajo como asistente dental. Entré a la música tarde. A veces me entra como un arrepentimiento que no me hayan enseñado que se podía estudiar música. 

José Encarnación: Stephanie Delgado lleva seis años en la banda. También es producto de escuela pública, y nunca tuvo una clase de música. En la banda aprendió a tocar la batería y el bajo.

Estudiante Stephanie Delgado: Quizás al yo saber más chiquita que se podía estudiar música, que podía ser músico o algo, a lo mejor no estaría ahora como asistente. Sería, no sé, maestra de música o especializada más a fondo en instrumentos.

José Encarnación: Stephanie estudió en una escuela que no tenía maestro de música. En 2022, el Departamento de Educación tenía solo 413 maestros de música para casi 900 escuelas públicas en el país. Esa reducción no se dió en un vacío.

Aquí, en Borinquen, la tierra del edén, la que al cantar el gran Gautier llamó la perla de los mares, una de las potencias musicales a nivel mundial, son más las escuelas que se cierran que las que se abren.

La escuela donde hoy ensaya esta banda fue abandonada a finales de los años 90. Fue un presagio al cierre de más de 700 escuelas por el gobierno de Puerto Rico.

El director de la banda, Richard Williams, convirtió las lágrimas en notas musicales. Ha luchado contra la eliminación de escuelas, recortes presupuestarios, un alcalde corrupto, y la falta de empleo y vivienda a nivel personal, para que la banda de Río Grande siga tocando. Desde una escuela rescatada, su proyecto llena un vacío de educación musical en la región noreste de la isla.

Mi nombre es José Manuel Encarnación Martínez y junto a Nore Feliciano miramos DE CERCA el rescate de las escuelas abandonadas en Puerto Rico.

Richard Williams: A mí me gusta demostrarle al sistema cómo se hacen las cosas.

Nore Feliciano: Escuchamos a Richard Williams Brañas, maestro de música y director de la Corporación Pro Banda de Río Grande. Nació en Nueva York, de padres boricuas, y se mudó a Puerto Rico durante su niñez. Trabajó por casi 20 años como maestro de música en el Departamento de Educación.

La banda que dirige lleva activa 70 años. Es un referente cultural en Río Grande. Richard comenzó a dirigirla en la década de los noventa y rápidamente se dio a conocer dentro del sistema educativo. Llegó a amenizar actividades que organizaba el Departamento de Educación y eventos oficiales hasta principios de este siglo. Era la época dorada del programa de Escuelas de la Comunidad. 

Reportero David Reyes: El gobernador en estos precisos momentos ya se encuentra acercándose al lugar y está saludando a los jóvenes, que como indicamos, en su mayoría pertenecen a las escuelas de la comunidad del país, niños y jóvenes que lo estarán acompañando hasta los terrenos del Morro. De hecho aquí hay un grupo de música el trío de cuerdas de la Escuela Libre de Música que está interpretando un hermoso tema.

Nore Feliciano: Para 1998, la administración de Pedro Rosselló identificó 1,538 escuelas públicas alrededor de Puerto Rico para, en teoría, darles más autonomía. Esto suponía mayor autoridad, libertad y responsabilidad para las escuelas a la hora de administrar los planteles, según su contexto comunitario.

Pedro Rosselló: Estamos aquí en un momento que para mí es muy especial y por eso lo hemos querido compartir con estos niños, estos jóvenes puertorriqueños. En esencia, cuando miramos lo que tenemos por delante, lo que define ese nuevo siglo, es en esencia estos niños y esta juventud puertorriqueña.

Nore Feliciano: Pero en vez de asegurar la existencia de las escuelas de la comunidad y darles recursos, años más tarde se hizo todo lo contrario: comenzaron a cerrarlas y diferentes administraciones gubernamentales convirtieron esa práctica en política pública.

Alegaron que había menos estudiantes e impulsaron la idea de consolidar matrículas en planteles más grandes. 

Uno de los primeros planteles que cerró bajo esta lógica fue la Escuela Josefina Quiñones, un ejemplo de lo que ocurriría después a lo largo y ancho del archipiélago. Allí, todos los jueves, se reúnen Richard y su banda.

Richard Williams: La escuela en sí fue la primera escuela superior de Río Grande. Tiene que tener como 100 años, 101, 102 años de construida. Todavía sirve el timbre [suena el timbre]. Ese era el timbre de la época.

Nore Feliciano: El edificio de la escuela es centenario. Está en el centro histórico de Río Grande. Fue la primera escuela superior del municipio. 

Los jóvenes ensayan en un salón al que le falta pintura, que recién tiene ventanas nuevas y que se va reparando gracias a las manos de los voluntarios que se suman a la iniciativa de poquito en poquito. 

Tienen dos aires acondicionados y los instrumentos donados se combinan con pupitres viejos. Aquí la mística del abandono se funde con el esfuerzo de revivir una chispa creativa en la juventud.  

Richard Williams: Tiene que haber una chispa, algo que los motive a ellos a estar y a seguir la música.

Nore Feliciano: La escuela la cerraron en 1997. El gobierno dejó perder la estructura y sus salones pasaron a ser cuartelillos para el consumo y venta de drogas durante casi una década. 

Richard Williams: Entonces, al principio tuve que meterme ahí, en el salón de allá, que era en el que yo daba clases. Meterme allí a vivir guillao. Estuve como un año.

Nore Feliciano: Cuando Williams dice que se metió allí, se refiere a que literalmente ocupó la escuela. Vivió allí por espacio de un año cuando lo perdió todo y quedó desempleado. 

Richard Williams: Como yo caí en la debacle, me dejaron sin sueldo, sin nada. Yo tuve que tomar la decisión. ¿Dónde voy a vivir? Llegué hasta a pensar en deambular.

Nore Feliciano: Se preguntarán cómo Williams, siendo director de la banda y maestro de música, llegó hasta aquí.

En el 2009, fue uno de los 30,000 servidores públicos que quedaron en la calle cuando el exgobernador Luis Fortuño firmó la llamada Ley 7 para el despido de empleados públicos. 

Reportero: [Hay gente] que plantea, Gobernador, que el empleo que consigan jamás va a estar cercano al que generaban en el gobierno. Y que eso lo que va a hacer es empobrecer a la familia.

Luis Fortuño: En algunos casos puede ser que sea el caso; en otros, no. Desgraciadamente, ¿cuál es la alternativa? ¿Cerrar el gobierno?

Nore Feliciano: Fortuño lo catalogó como una “medicina amarga”, necesaria para eliminar un déficit millonario. La ley generó protestas masivas. Muchos de los cesanteados fueron maestros. Williams fue uno de ellos.

José Encarnación: Luego de perder su empleo como maestro, la única fuente de ingreso de Williams era el contrato que tenía con el municipio de Río Grande para dirigir la banda.

Pero después de estar contratado por casi 10 años, el entonces alcalde del Partido Popular Democrático, Eduard Rivera Correa, eliminó la Banda de Río Grande. Con esto dejó a Williams sin trabajo y a los jóvenes participantes sin poder desarrollar sus talentos. 

Richard Williams: Te digo, yo perdí mi casa, perdí mi matrimonio, lo perdí, tuve que ir a Capestrano, o sea, tuve que dormir en una ratonera, porque eso era una ratonera lo que yo tenía por ahí. 

José Encarnación: Además de irse a vivir, literalmente, a la escuela Josefina Quiñones, Williams también quiso rescatar el proyecto de la banda. Creó la Corporación Pro Banda de Río Grande y usó el plantel abandonado para reunirse y practicar. 

Pero, el municipio quería la Escuela Josefina Quiñones para usarla como centro pre-escolar. Peleó para sacarlo de allí.  

Williams quería la titularidad de la escuela, pero no sabía cómo lograrlo.

Richard Williams: Viene un amigo y me dice ‘mira, yo trabajo en Obras Públicas y Obras Públicas tiene unas escuelas. Yo voy a chequear si esa escuela está ahí’. Pues efectivamente, el tipo me llama y dice “mira, Williams, esa escuela está por DTOP”.

José Encarnación: Aquí un paréntesis. DTOP es el Departamento de Transportación y Obras Públicas. ¿Por qué puede vender una escuela abandonada? Desde 1975, el secretario de esta agencia tiene la facultad de vender, arrendar o traspasar cualquier propiedad del Estado que deje de tener utilidad pública. Esto incluye las escuelas clausuradas y sin uso. 

Richard Williams: DTOP parece que no sabía que la habían abandonado, y entonces ah, chévere, ¿qué hay que hacer entonces para nosotros pedirla? La persona me dice “ve donde fulano”. Conexiones. Como brega este país, con conexiones. Voy donde la persona, pero la persona me dice “tienes que buscar un senador o un representante que haga una resolución”.

José Encarnación: Y la meta de Williams era precisamente conseguir que el gobierno le pasara la titularidad de la escuela que rescató cuando quedó sin trabajo de maestro.

Richard Williams: Aquí fue, dije yo. Yo con mi delirio de persecución, de que soy de partido de izquierda, pero algo me dice hazlo, no está demás que lo haga. Pero yo no creía que en ningún momento se iba a dar.

Tocó la parte política, pero la realidad es que se estaba haciendo el trabajo y se estaba participando y la banda llegó a ser la banda que el gobernador pedía, Rosselló la pedía. Y cuando íbamos a la actividad y todo el mundo conocía de la banda. O sea que en realidad no fue como otros casos que te dan la propiedad, hacen mil chanchullos, pero no hay na’.

José Encarnación: Aunque Williams siguió todos los pasos para conseguir la titularidad de la estructura, algo se estancó en el camino. 

Solo faltaba la firma del gobernador Fortuño, el mismo que puso fin a su carrera como maestro en el Departamento de Educación cuando firmó la Ley 7.

Cuenta Williams que para llegar a hablar con Fortuño, buscó la forma de que la banda tocara en una actividad que se llevaría a cabo en la Escuela Superior Pedro Falú en el mismo municipio. Allí iba a estar el gobernador.

Richard Williams: Yo lo que quería era que el gobernador viera a la banda, que viera que no es un paquete que nosotros estamos metiendo, que queremos la escuela; pues vamos y nos preparamos. Bueno, tú sabes cómo los músicos se preparan. Y ensayamos. Esos muchachos hicieron maravillas para que ese día ellos lucieran de show. Y así mismo fue, cuando los muchachos tocan el gobernador vino donde mí para felicitarme, tremenda banda… Y yo ahí en menos de un minuto le expliqué toda la problemática que había.

José Encarnación: Luego de un tiempo, en el que incluso llegó a pensar que el Gobernador había ignorado su petición, Williams recibió la noticia de que se había aprobado el traspaso. Al estar frente a Fortuño, Williams le dijo:

Richard Williams: “Me botaste por la Ley 7. Pues por lo menos déjame ganarme mi vida en la escuela trabajando con los muchachos”. Y cuando hablo con los muchachos, me dijo: “La escuela va a pasar ustedes, no hay problema”. O sea, esa fue la primera etapa de la primera pelea. Que ahí te obvié mil situaciones y mil cuestiones que surgieron en el proceso, pero fue un proceso bien político y bien doloroso.

José Encarnación: Bajo el mandato de los gobernadores Alejandro García Padilla, Ricardo Rosselló y Wanda Vázquez, se cerraron por lo menos 480 escuelas públicas en Puerto Rico. 

Desde el 2017, se han alquilado o vendido más de 330 de estos planteles.

Para organizaciones como la de Richard Williams, conseguir la titularidad permanente de estas escuelas es una larga batalla burocrática.

El licenciado Francisco Santiago trabaja precisamente apoyando a comunidades que intentan rescatar planteles cerrados y abandonados por el Gobierno. Lo hace a través de la Red Comunitaria de Respuesta, un grupo que nació en el 2020 y que reúne varias comunidades a través de Puerto Rico.

La Red lanzó en agosto de 2023 una “Guía para el rescate de escuelas”, para ayudar a que otras organizaciones tengan éxito en estos procesos.

Licenciado Francisco Santiago: Tanto yo como otros compañeros y compañeras de la red nos adentramos a tratar de lleno el tema de rescate de escuela. Básicamente porque nos dimos cuenta de que las preguntas que teníamos otra gente las está teniendo.

José Encarnación: La guía presenta los pasos a seguir desde la planificación comunitaria, hasta aspectos legales. También orienta sobre el rescate formal y el informal.

Francisco Santiago: No podemos nunca sacar de por medio que el proceso de implementación de políticas de cierre masivo de escuelas se dio de la mano con la corrupción. Y entonces, desde esa perspectiva, sí podemos ver que hay quienes pueden tocarle la puerta a estas instituciones que manejan el proceso de obtención de permisos y a quienes necesitan un marrón para poder abrir esa puerta porque no tienen esos accesos.

José Encarnación: Y claro, rescatar escuelas tiene unas implicaciones. 

Francisco Santiago: Estamos hablando de comunidades rezagadas, comunidades que adquieren o entran en posesión de control de estas escuelas con poco o ningún dinero, que el poco dinero que tienen es para poder crear la sin fines de lucro con la exención, para entonces poder formalizar el proceso y que las inversiones requeridas para poder, por ejemplo, hacer un centro de acopio o hacer un centro de manejo de mínimo de emergencia, de poder tener unas placas solares con unas cositas pues de una inversión bastante grande. Y en ese aspecto el dinero y por otro lado el otro gran problema es que mucho de este trabajo es trabajo no remunerado. Estos son vecinos y vecinas que en solidaridad sacan de su tiempo a pulmón, moliendo vidrio con el pecho para poder echar para adelante su proyecto.

Nore Feliciano: La segunda etapa de la lucha de Williams fue dar continuidad al proyecto. Reformar y darle mantenimiento a la estructura es una tarea monumental. El ingreso con el que cuenta para mantener la propiedad y la operación de la banda depende principalmente de las clases que ofrece, o de donaciones. 

Hay clases individuales y grupales. Los instrumentos disponibles son piano, trompeta, trombón, saxofón, bajo, batería, conga, bongó e instrumentos de percusión menor. Al menos 50 estudiantes se benefician cada año.

Estudiante Yaritza Rolón: Yo ahora mismo tengo dos trabajos y llevo diez años aquí y todavía sigo fiel aquí. Me motiva la música. Me gusta un montón la música y sobre todo lo que el míster está haciendo.

Nore Feliciano: Escuchamos a Yaritza Rolón, saxofonista que actualmente se desempeña como líder de los estudiantes del conjunto.  

Estudiante Yaritza Rolón: Se ha visto cómo los estudiantes han mejorado en cuanto a su personalidad, en los estudios. Casi todos los que están aquí son cuatro puntos. Ahora mismo tenemos una compañera que estaba con nosotros, está estudiando Ingeniería en Mayagüez. Yo creo que todas las becas que hay en Puerto Rico las ha recibido.

Nore Feliciano: Para mantener vivo el programa, Williams le solicitó un donativo al municipio de Río Grande para la compra de instrumentos y materiales. Recientemente recibieron la aportación. Al ver el ensayo, se observan los estudiantes practicando con los instrumentos nuevos.

Álex Calzada tiene 12 años y es uno de los estudiantes del grupo. Llegó en junio, y en tres meses y medio es uno de los percusionistas principales de la banda. Toca timbal, tambora, tambores, el bongó, las congas, el güiro y lleva la clave con la campana. 

Naiomylee Torres: Estoy aquí porque él desde pequeño le interesaba tocar bongó y conga. Y llegamos aquí a través de un tío de él que nos dijo que aquí en Río Grande había una banda de música. Y aquí llegamos.

Nore Feliciano: Su madre, Naiomylee Torres, asegura que estar en este grupo ha mejorado el rendimiento académico de su hijo. 

Naiomylee Torres: Es un poquito más serio, más responsable, las directrices las coge más directas.

Nore Feliciano: Williams sigue adelante con su cruzada.

Richard Williams: Estamos haciendo lo que tenemos que hacer, lo que no tenemos es lujo, no tenemos la escuela bien pintada, no tenemos aire acondicionado, en algunos salones, pero la banda está ahí y se está haciendo el trabajo como tienen que hacer hacerlo. Los jóvenes siguen beneficiándose del área musical, de lo que se está dando.

Nore Feliciano: Escuchaste De Cerca, un podcast del Centro de Periodismo Investigativo. Fue producido y narrado por Nore Feliciano y José Encarnación. El diseño de sonido fue hecho por Nore Feliciano. La edición estuvo a cargo de Luis Valentín y Carla Minet. La canción tema es El Arca de Mima. Para leer más historias y apoyar al CPI, entra a periodismoinvestigativo.com.