El determinismo como excusa para la negligencia gubernamental

A pesar de las experiencias en torno a los aspectos que deben mejorarse para proteger vidas, la infraestructura y garantizar los servicios esenciales durante una emergencia, el Gobierno de Puerto Rico insiste en un discurso determinista que describe los desastres como inevitables, para así justificar su inacción en los renglones de preparación y respuesta. 

Si bien es cierto que, por la ubicación y climatología, las islas de Puerto Rico son propensas al impacto de huracanes, también hay que aceptar que la pérdida de vidas, la ausencia de electricidad por meses, el colapso de puentes de décadas de existencia y la inaccesibilidad a servicios de salud no necesariamente son inevitables. Son parte de desastres políticos que evidencian las fallas de una administración pública en la cual el mantenimiento a la infraestructura crítica, la garantía de un techo digno y el derecho a la salud dejaron de ser prioridades. Para el profesor de historia de la Universidad de Yale, Stuart Schwartz, el uso del término “natural” para describir al huracán María falla en reconocer que la falta de preparación gubernamental, la infraestructura débil y la situación fiscal precaria vigente son en gran medida responsables de lo ocurrido en Puerto Rico tras el azote del ciclón. 

“No son las tormentas en sí las que matan a estas personas. Es lo que hicimos o no hicimos antes y después lo que fue responsable. Preparación, política y voluntad es lo que se necesita para enfrentar estos desastres ‘naturales’.

La mano de Dios en el gobierno

La Constitución de Puerto Rico garantiza la separación de Iglesia y Estado como un principio preciado que protege a los ciudadanos del poder de la Iglesia y a la Iglesia del poder del Estado. En Puerto Rico, por influencia de una tendencia que viene desde Estados Unidos, cada día esa línea se hace más difusa. En tiempos de crisis fiscal vemos como el dinero público se utiliza para fortalecer organizaciones que se presentan como comunitarias pero con agendas de proselitismo religioso. Mira la lista de las organizaciones que recibieron millones de dólares en donativos legislativos desde 2008.